top of page

Acerca de la impresión 3D

La impresión 3D, también conocida como fabricación aditiva, es un proceso de creación de objetos tridimensionales a partir de un modelo digital. Se trata de colocar capas de material, generalmente en forma de plástico, metal o resina, para construir el objeto capa por capa. Se utiliza en diversas industrias, incluidas la manufacturera, la sanitaria, la automovilística, la aeroespacial y la de bienes de consumo. Permite la creación rápida de prototipos, la personalización y la creación de geometrías complejas que pueden resultar desafiantes o imposibles con los métodos de fabricación tradicionales.

La elección del material de impresión 3D puede afectar significativamente el diseño y el rendimiento de un objeto impreso. Los diferentes materiales exhiben propiedades distintas que influyen en factores como la resistencia, la flexibilidad, la apariencia y la idoneidad de la aplicación.

El material más común para la impresión 3D es el PLA, que es fácil de usar y adecuado para una amplia gama de impresoras 3D. El PLA se elige comúnmente para proyectos de aficionados y con fines educativos debido a su accesibilidad y facilidad de manejo. Sin embargo, no es adecuado para aplicaciones que requieren alta resistencia al calor o resistencia estructural.

Existen numerosos materiales disponibles para la impresión 3D, cada uno con sus propiedades únicas. Entre estas opciones, mi material preferido es el ABS.

Reconocido por su robustez y durabilidad, el ABS es ideal para producir prototipos resistentes y piezas funcionales de uso final. Su resistencia superior al impacto, superior al PLA, lo convierte en la opción ideal para aplicaciones que requieren una dureza excepcional. El ABS cuenta con un punto de fusión más alto en comparación con el PLA, lo que le confiere una mayor resistencia al calor.

A pesar de su versatilidad para diversas aplicaciones, cabe señalar que trabajar con ABS exige un cierto nivel de experiencia y equipamiento específico. Los desafíos notables incluyen deformaciones y encogimientos, la emisión de olores y humos durante la impresión y la sensibilidad a la temperatura. Sin embargo, una de las características más destacadas del ABS radica en su densidad; notablemente liviano en comparación con materiales como PLA, PETG, nailon o alternativas reforzadas con fibra de carbono.

Esta ligereza hace del ABS una excelente opción para la elaboración de accesorios. Por ejemplo, una caja fabricada en ABS pesa sólo 300 g, frente a los 400 g de PETG. La diferencia de peso se vuelve particularmente significativa cuando se incorporan componentes adicionales, que potencialmente exceden el peso de la propia PC portátil.r jugadores.

bottom of page